EPOC: Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica
La EPOC o Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica es una enfermedad con una alta prevalencia en países desarrollados. Aunque la causa principal es el tabaco, hay un 10% de afectados de EPOC que no son fumadores.
Cuando padecemos de EPOC nuestras necesidades nutricionales cambian, esto es algo que poca gente conoce, pues no identifica que los pulmones tengan algo que ver con la alimentación. La realidad es que cerca del 50% de las pacientes con EPOC sufren desnutrición, por lo que si vemos que empezamos a perder peso, lo ideal es acudir a un dietista-nutricionista para que revierta la situación.
Las consecuencias de la desnutrición en la EPOC
Las necesidades de calorías de los pacientes con esta patología suponen hasta 10 veces más que sin esta enfermedad, este es el motivo principal de la gran cantidad de afectados con desnutrición.
La desnutrición en la EPOC o bajo peso empeora la función renal y la calidad de vida de los pacientes, además de aumentar el riesgo de mortalidad o complicaciones. Por este motivo es de suma importancia que un nutricionista nos de pautas concretas para adaptar nuestra alimentación a la EPOC.
Aspectos nutricionales a tener en cuenta en la EPOC
Lo primero si hay desnutrición en la EPOC es corregir este estado, aunque en algunos casos lo que hay es exceso de peso, por lo que también habría que corregir esta situación.
Un nutricionista nos puede ayudar a estructurar las comidas y a crearnos un buen plan alimentario.
Hay que tener en cuenta que tenemos que fraccionar las comidas en varias tomas, mínimo 5-6, al día, limitando la cantidad de alimento de éstas, además de la velocidad con la que comemos.
Qué comer si tienes EPOC
Aunque en la población en general se recomienda que la energía total provenga como mínimo en un 50% de los hidratos de carbono ( arroz, pasta, pan, pero también legumbres, etc…) , en la EPOC esto cambia: en la EPOC no hay que consumir tantos hidratos de carbono, sino un 50% como MÁXIMO.
En la EPOC hay que aumentar la proporción de proteínas ( carne, pescado, huevos, quesos) que ingerimos casi hasta el doble de lo recomendado para una persona sin esta patología (1,5g/Kg/día comparado a los 0,8g/kg de una persona sin este enfermedad). Hay muchas personas que no conocen que han de aumentar el consumo de carne, pescado, legumbres, lácteos, etc… cuando tienen EPOC.
En la EPOC también hau que aumentar la cantidad de grasa, siempre saludable, y no superior al 50% de la energía total. La fibra y el agua serán fundamentales para evitar el estreñimiento, y tampoco pueden faltar en nuestra dieta compuestos antioxidantes, como vitamina E, C, Selenio, Zinc, Magnesio o carotenos. Otro nutrientes importante es el omega 3, que nos ayuda a mantener un coeficiente respiratorio adecuado.